¡Hola a tod@s!
Hoy vamos a seguir tratando el tema del lenguaje para conectar, fijándonos en otro patrón que la gente repite con frecuencia.
¿Cómo sería el mundo si la conversación siempre fluyera fácilmente y todos se entendieran constantemente? ¿Cuánto más sencillo sería si aceptáramos todos los puntos de vista diferentes, en todo momento y nunca nos ofendiéramos? Aunque suene bien, con el coaching aprendes rápidamente que hay algunas razones fundamentales por las que estamos muy lejos de que eso suceda.
Lógico/Emocional
Parte de la dificultad es que cada uno de nosotros a veces interpreta y responde lógicamente y a veces emocionalmente. Nadie es 100% lógico o 100% emocional. Todos usamos ambos, al menos parte del tiempo.
Hay dos factores que pueden hacer que la conversación sea más difícil de lo que podría ser. Uno es que nadie tiene una etiqueta en la frente que declare su patrón actual. Estamos muy bien entrenados al estilo Pavlov para reconocer y obedecer las señales rojas y verdes, sabemos que debemos detenernos o sabemos que es nuestro turno para movernos. Pero no existen señales tan obvias que nos ayuden a identificar cuándo alguien está siendo más lógico o emocional en la forma en que percibe y piensa.
Otro factor es que muchas veces queremos que los demás sean iguales a nosotros y nos resistimos cuando son diferentes, en lugar de simplemente aceptarlos y disfrutarlos tal como son.
¡Que no cunda el pánico! No todo está oculto tampoco.
Hay pocas pistas sobre el estilo de pensamiento, y son sutiles, presta atención. Cuando alguien hace preguntas, generalmente recopila información y trata de pensar lógicamente y organizar toda la información en su mente, para construir un modelo que tenga sentido. Una reacción o “arrebato” repentino e inesperado generalmente indica una fuerte respuesta emocional.
Lingüísticamente, hay algunos signos reveladores que también insinúan si el pensamiento lógico o emocional es el dominante en ese momento.
Además de las preguntas (que suelen ser de búsqueda de hechos lógicos), otras frases que demuestran el pensamiento lógico son: “tiene sentido”, “siguiente paso”, “preciso” y comparativos como “mejor”, “más rápido”, “más barato”, etc. .
Ejemplos de frases que a menudo sugieren pensamiento emocional son: “me gusta”, “odio”, “bueno”, “malo”, “correcto”, “incorrecto” y sugerencias sobre la sobrecarga del umbral, como “demasiado”, “demasiado pronto”. “, “abrumado”, etc.
Escuchar atentamente el lenguaje es una de las formas más útiles de detectar si alguien está usando su pensamiento lógico o emocional en ese momento. Ten en cuenta que es útil en todos los métodos de comunicación y puede funcionar bien en persona, por teléfono y con la palabra escrita.
Si tienes el lujo de tener a la persona delante tuyo, no desaproveches otras herramientas, como leer el lenguaje corporal.
Sigue leyendo para aprender más sobre el pensamiento lógico/emocional…
Comprender el pensamiento lógico/emocional
1. Escucha para encontrar hechos.
El pensamiento lógico a menudo implica filtrar la información, organizar lo que es más importante y lo que puede faltar. Cuando alguien está pensando lógicamente, a menudo está recorriendo varios escenarios de “qué pasaría si” en su mente.
Pueden estar imaginando modelos de construcción, como un niño jugaría con piezas de Lego, explorando diferentes formas de juntar la información para ver qué tiene más sentido. Cuando están cara a cara, es común ver muchos movimientos oculares y el uso frecuente de mirar hacia arriba o mirar fijamente a lo lejos.
En estas situaciones, recomiendo hablar un poco menos y darle más tiempo a la otra persona para clasificar la información y construir sus modelos.
Las preguntas son buenas.
Por lo general, las preguntas son una buena señal de que la otra persona está interesada y quiere más información. Pueden sonar como si fueran desafiantes o incluso desagradables. Pero, si están preguntando, por lo general quieren más información.
A veces, las preguntas pueden estar ‘cargadas’, es decir están “tendiendo una trampa”, conduciendo la conversación con asunciones. Un ejemplo es “¿cómo evitarías los peligros obvios?” Siempre que alguien haga preguntas, existe la posibilidad de que la conversación progrese hacia una conclusión satisfactoria. Resiste la tentación de ponerte a la defensiva y, si necesitas tiempo para pensar, pide que te cuenten de qué manera eso es importante para ellos. Su respuesta podría apuntar a una preocupación emocional de su parte. Como mínimo, puede darte más tiempo para pensar en tu próximo movimiento.
2. Las emociones son profundas.
Cada vez que alguien percibe algo emocionalmente y da una respuesta emocional, a menudo vendrá desde lo más profundo de su inconsciente.
Tal vez saben si les gusta o no les gusta algo, pero es posible que no sepan por qué. Rara vez es productivo tratar de decirle a alguien que “debería sentirse diferente” y puede ser incluso insultante.
Recomiendo compasión. Haz lo que puedas para empatizar con cómo se sienten. A veces puede ser útil hablar sobre por qué es importante para ellos o qué sería incluso mejor (en un mundo ideal).
3. La “escalada” puede ser complicada.
Las situaciones “escalan” fácilmente cuando alguien está pensando y respondiendo emocionalmente, las cosas se salen de control. Cada uno tenemos nuestros límites sobre cuánto podemos hacer frente. Cuando las personas llegan a su límite, hay varias reacciones, como cerrar la comunicación, irnos, enojarnos y levantar la voz, o incluso utilizar un lenguaje corporal agresivo.
Por lo general, hay señales de advertencia tempranas de que una conversación no va bien, antes de que las cosas se intensifiquen hasta el punto de complicarse.
No recomiendo tirar granadas de mano a un volcán, sólo para ver qué pasa. Es posible que obtengas más emoción de la que puedes manejar. En cambio, recomiendo precaución y estar preparado para salir de la conversación si es necesario, o al menos encontrar una manera de ‘aparcarla’, para continuar en otro momento.
Imagina que consigues familiarizarte con reconocer cuándo alguien muestra signos de pensamiento lógico o emocional. ¿Haría esto que tus conversaciones fueran más fáciles y agradables?